MUJEREANDO

Queridos seres : como veo que nadie pone un tema no se si es por timidez o falta de entusiasmo, empezare yo con una cuestion absolutamente ajena al magíster aca va.Adoraría salir a mujerear. Este término no es propio sino que, estaba en la peluquería pintando de negro nuevamente mi pelo, pese a prometer a mi marido no cortar ni tinturar mi cabello y volver a mi color original, castaño oscuro, entonces tomé una revista, exactamente "Cosas" y leo una entrevista a Malucha Pinto recién llegada del Alto Bio Bio, dónde estaba chamaneando y mujereando.

Yo inmediatamente atrapo el término, porque me subyugó lo hago mío y empiezo a elucubrar algunas ideas mientras, mi peluquero inyecta de azabache mi pelo y me comenta de sus vacaciones en Punta del Este, yo sólo escucho un sonido lejano e ininteligible porque quiero llegar a mi casa y escribir las ideas que, me asaltan y fascinan.

Quiero mujerear, es decir hacer un viaje a cualquier lugar extraño y hermoso sólo con mujeres. Debo confesar que, me provoca nostalgia y quisiera ser cómo una de esas señoras que, se reúne a tomar te con sus amigas y hablan de las plantas, las cortinas y los hijos.

A menudo observo varias mujeres reunidas conversando animadamente y yo ahí intentando imaginarme ser una de ellas, estar en ese grupo y me detengo a escuchar lo que hablan y normalmente versa sobre sus maridos, ex maridos, trabajo o datos de peluquerías, pero entonces nada me importa menos y me encantaría que, se percataran de mi presencia y me convidaran a su mesa, pero es imposible porque aquellas señoras son amigas desde el colegio, universidad o trabajo.

Es que, nunca he tenido una amiga en términos de mantener una relación frecuente, permanente, perdurable y atemporal, sólo mujeres conocidas a lo sumo unas primas con quienes me veo en época de verano en Coliumo o en algún acontecimiento familiar.

Toda mi vida ha estado regida por hombres, tengo tantos hombres que, soy un ser promiscuo, empezando por quien fue mi padre, mi hermano, marido, amigos.

Desde que, estaba en la escuela los grandes compañeros de juego han sido ellos, en mi vida adulta, laboral y profesional sólo me he relacionado afectivamente con varones y mis hermanos son precisamente hombres, será porque me resulta más fácil comunicarme con ellos, será porque en los ámbitos dónde me desenvuelvo los hombres han resultado ser acogedores, empáticos y solidarios.

Entonces deseo tener una amiga, varias amigas, muchas amigas, mujeres para salir, tomar resentidamente de los hombres ni para hacer comparaciones poco felices, menos aún para intentar igualarnos en términos de masculinizarnos, nada me produce más rechazo que, las mujeres machistas, feministas o resentidas y aquellas que pretenden posesionarse de un papel que es masculino.

Cada ser está perfecto en su rol, así se produce el justo equilibrio, la recta ratio, los hombres con lo suyo en un espacio de libertad e igualdad académica, laboral , intelectual, doméstica-familiar dentro de su género y sexualidad y las mujeres con nuestros espacios en todos los ámbitos académicos, profesionales , laborales, domestico-familiares dentro de nuestra feminidad, es decir si yo tengo ganas de llorar, simplemente lloro y no por eso seré alguien débil, insegura, o inestable , sostener lo contrario es ser presumidamente prejuicioso y básico.

Puedo hacer lo que quiera en mi rol, usar perfume, joyas, sostenes sin necesidad de incendiarlos ni de lanzarlos al viento en señal de protesta o rebelión, es que las rebeldías trascienden los géneros y son eminentemente ideológicas , puedo así mismo vestirme de pantalones conservando mi rol ,entonces ese discurso de mujeres feministas y masculinas me parece poco elegante, ahora es innegable que, tenemos una mezcla de femenino y masculino cómo el ying y el yang, la perfecta dualidad y equilibrio y precisamente por eso se debe preservar celosamente nuestra esencia .

Podemos dejar que, un hombre nos abra la puerta del auto o abrirla nosotras mismas o en su defecto, abrírsela a él, podemos usar polleras y manejar una empresa sin necesidad de intercambiar roles que, a mi juicio son necesarios y exquisitos en cada uno de nosotros ,podemos ser espontáneas, explosivas enérgicas y tener un carácter fuerte ya que eso forma parte de nuestra individualidad, personalidad y naturaleza siempre conservando nuestro sagrado e intransferible género, todo esto sin perjuicio de mi naciente amistad con algunas mujeres cool, cómo dice Constanza de éste espacio por ejemplo .

La pregunta es ¿que os parece esta propuesta de mujerear? ¿quien se suma a esta iniciativa? besos y saludos a todos los seres.